jueves, 29 de mayo de 2014

Mojaste fondo.

“Oscar ponme una copa más, la quiero olvidar. 
Iban a cerrar cuando te oí decir ¿qué tal estás? 
Con mis canciones sigo aquí, ¿tu qué tal? le pregunté, 
¿qué tal en esto de vivir? 
Yo cansado de viajar, tu cansada de sentir como 
el tiempo se te va.
                       La fuga
                             
Que hasta los más fuertes tienen golpes
de débil cordura cuando ondea la bandera del vacío
de la ausencia de lunares contados
cuando se vuelven caros los versos
de buenas noches.

Mojaste fondo la entrepierna del ayer
mientras hoy te acuerdas entre sollozos
como niño al que roban su juguete
mañana, entenderás todo, lo que echaste de tu vida
maldiciendo cada lagrima que provocaste
y cada noche, que me diste un folio en blanco
escondiendo la pluma.

Cambiemos
cambiemos
cambiemos
me repito una y otra vez
sin voz
pero en alza de locura
que es la verdadera cordura
cambiemos me gritan los ventrículos
cambiemos
el sentido de los aullidos de las botellas vacías
que porfían respiros en el ombligo de la luna
a sabiendas que las lobas están ocupadas
entreteniendo a cerdos de tres al cuarto
sin ventanas, ni rayos de luz.

Caminemos
caminemos
caminemos y gritemos
y cantemos
y follemos
como nunca antes
como antes siempre, sin preocupaciones
sin velas, con amor, con humedad
con sonrisas y sinceridad

Sexo de buenas noches
y poesías de despertar
ansias de vivir en libertad
abolido el régimen de tus caderas
busquemos la pasión sin fronteras
quiero volver a colgar unas bragas en la lámpara
y tapar los mordiscos del techo de mi cárcel
a golpe de poesía
o de corrida
que para el caso
en muchos de ellos
son sinónimos

“Nunca invertí en amores de una noche mi locura”
pero nunca tampoco me imagine en estas
el techo cada vez está más lejos
y el cielo más cerca
las aceras más repletas
y la barra con más estrellas que nunca
dibujando muecas alegres a su paso
en el barrio donde el tiempo está de más
y la poesía es transeúnte por los rincones
y aledaños de las faldas por la noche.

Sigo buscando compañía para lamer heridas
las botellas me quedan pequeñas
dando tumbos entre sastres de sonrisas
y tanto tu, como el tiempo
estáis de más así que corre
que te esperan de vuelta
pero no de estos poemas

hasta nunca.

martes, 27 de mayo de 2014

" La sonrisa despeinada de ir en contra de los vientos"

“de leña seca su ropaje, petenera su lamento 
en carne viva el carruaje que la lleva a sus adentros 
la sonrisa despeinada de ir en contra de los vientos, 
de ir en contra de los vientos
                                  Marea

Hacer recuento nunca fue tan jodido
como tocar en fondo de escarcha ambigua
ámbar de un pasado
circulando sin cohibirse
madrugada tras botella
hiela por cada uno el izquierdo de cualquiera.

Estatua en recaída
de días en vela con sueños
bajo vuelo
de entre piel erizada y lágrimas
que nunca debieron partir
o llegar
en su defecto
a oídos de impropios.

Desaprovechar latidos en jurar
y beber sin jugar
cerrando un ciclo sin curar heridas
de entrañas que lloran
tinta y sangre que añoran
abrazos de menos y jodidas de más.

Andar a ciegas y a caballo
entre los cuartos de un descuido
sin más fin que ver un desliz pasear
por mis sábanas
arriba o abajo
puedes elegir que yo
no dejo promesas sin cumplir
al menos ajenas.

Un abrazo más que mil palabras
erratas desechas
maletas repletas de desencanto
parten
en dos sus sonrisa y
que quede claro
que no hay pecado más grande
que despeinar la sonrisa
de una princesa de cuento
de hadas y  bonitas casualidades.

domingo, 25 de mayo de 2014

Juguemos a ser directores.


Aquí ando de nuevo
Perdiéndome entre letras y cafés de madrugada
Noches sin velas de más con polvos de menos por las esquinas
Con las mismas marcas en la cara y quemaduras en los labios
Por chustas demasiado apuradas. 



Cuántas canciones nos sorprenden
Prendiéndonos recuerdos en las yemas
Perdiéndonos por el sur, en busca de nuestro norte. 



Que feos se antojan
Pero que poquito me dueles
Que poquitos me hueles
Que rápido te pierdes y que fácil me encuentro. 



Cualquiera no es suficiente
A veces con poco nos sobra
Y con mucho nos quedamos cortos
Pero yo no soy Ben
Y menos aún tu Kate
Ni fueron los “japos” los que bombardearon nuestro Pearl Harbor. 




Fuimos nosotros, fuiste tú, fui yo
Fue el destino
Fueron demasiadas promesas
Fuimos demasiado jóvenes
Te cansaste muy rápido
Me jodiste muy poco en la cama y mucho en los rincones
Que hoy plasmo y no comprendes a vuelta de letra de cada verso
De cada uno de estos que ya no te escribo
En cada vez que me corro
Yo solo
Y no te lo dedico. 


Las canciones cambian
Y siempre es bonito volver a ver una película antigua
De esas que te dejaron marcas que luces orgulloso una vez cerradas.




Miro a mi hermano y me veo reflejado en un yo de hace no mucho
Preocupado tan solo en no pisar las líneas del suelo
Y colorear sin salirme de las mismas
Mientras que ahora procuro no tropezar con las que hay en la barra de más de un bar
Protagonistas de historias torcidas
De corridas sin protagonistas. 



Mientras tanto solo me encuentro entre versos de grandes
Con un sinfín de Estrella Galicia
Y si no es suficiente
Cargo el cubilete de azar con licor café
Más los de siempre
Con los que pintan mi transición de primaveras
Haciendo honor a mis colores

Trago a trago, sonrisa a sonrisa. 




Ando buscando compañera que me lama las heridas
Ando buscando el sentido a mi Show de Truman
Pero ando… que dicen que es bueno para la salud
Quieras que no, compenso un poco todo lo que fumo
Y si me canso de andar… joder, vivo en Narnia
Tengo el C2 y un bus con Destino de Caballero.




Es triste que todas se valoren por el final
Si es bueno, fue la hostia
Si es malo, no mereció la pena
Y yo… acostumbro a ir de hostia en hostia
Pero con finales de mierda
Así que lo mejor será dejar de jugar a las películas
Que soy un pésimo actor
Y no hay mejor satisfacción que darse cuenta
Que nadie mejor que tú mismo
Para hacer el guión de tú vida.

viernes, 9 de mayo de 2014

Enhorabuena, tienes el cuaderno de un escritor.

Quiero fuegos artificiales a pie de arena
la humedad la ponemos nosotros.

" A lo mejor vas caminando un día por la calle y te cruzas con el amor de tu vida"
Si, quizás y lo deje pasar
No busco el amor de mi vida
Busco una con la que perder (la noción de) el tiempo
Con la que tener buenas noches y regalarla unos buenos días
Con la que perderme entre sus sabanas mientras entramos en el 1001x1 de fuegos artificiales
A la que decir te quiero sin la necesidad de echar de menos
Con la que vestir mis miedos de alegrías

No busco el amor de mi vida
Quizás te busque a ti.

Te quiero Atleti.

¿Sabes qué?
Aún recuerdo cuando jugamos a las películas
Y lo bien que interpretabas que esto sería para siempre
Hay que joderse con la cantidad de veces
Que me puse el final de nuestro corto
Supongo que soy un pésimo actor
Has estrenado la segunda parte y yo
No soy el protagonista.

Me han ofrecido varios papeles
Pero ya sabes… en casi ninguno
Esperaría a ver el desenlace

Después de tanto, es lo que nos queda
Somos dos nombres más
Escritos con mala letra en un guión  con reparto de dos duros
Una historia ramificada
Dos nombre
En una servilleta usada de un antro de campamento
Cenizas sin ascua
De una ardiente historia fugaz
De dos locos adolescentes que jugaron a amarse
Y ya sabes
En este
El que más quiere
Pierde

Todas las películas tienen
Y nosotros tuvimos
Demasiadas erratas y muy pocas caricias
Para sentarnos a ver los créditos de la nuestra

Dos nombres
Dos recuerdos
Un olvido

Vamos, no seas vergonzosa
¿A qué quieres jugar ahora?
Tú eliges
Y yo
Yo ya no jugare más bajo tus reglas
Ni bajo tu falda
Ni entre tus sábanas
¿Sabes por qué?
Porque no me ha dolido escribir esto.

He reencontrado el calor en los brazos de mi gente
He reencontrado la sonrisa
Sin la necesidad de rubias
Pero ya sabes que mi debilidad es una fugaz estrella gallega
Me he reencontrado a mí
Y no te permito que me escuezas más tiempo
Del que me dura un chester entre los dedos

Que tengo demasiados motivos para sonreír
Y si desaparecen… bueno
Pues que desaparezcan
Que soy del atleti

Y llevamos una temporada muy muy de puta madre.

martes, 6 de mayo de 2014

Lágrimas de tinta y sangre.

Hoy me he vuelto a quemar los labios
Por culpa de un café recién hecho y una chusta
Demasiado apurada
Igual que nos pasó a nosotros
Apuramos demasiado mientras disfrutamos viéndolo pasar
Y acabo el tiempo quemándote las yemas
Mientras yo… seguía demasiado drogado por tu sonrisa
Como para ver
Que ni tu eras tu
Ni yo era yo
Que tenías un seguro a terceros
Iluso de mí, que te prometí mis 1001 noches
Y tú te perdiste con la primera luna llena
Con un lobo cualquiera que te aulló lujuria.

Todos tenemos cicatrices
Marcas
Que por mucho que pase el tiempo
Siguen escociendo con el cambio de clima
Marcas
Que él no conseguirá entender
Ni a las que tú sonreirás
Ni yo dejare de recordar.

Todos hemos sido gatos disfrazados de canes
A media noche con unas drogas de más
Y ropa de menos
Todos nos hemos corrido imaginando otras caras
Otras caricias
Recordando otros gemidos.

Todos hemos perdido trenes
Bueno, mejor dicho a todos nos han echado a patadas
De trenes en marcha y sin destino
Todos hemos escuchado promesas que caen
En sacos rotos con doble fondo de fango y mierda
Y todos
Hemos tenido gente
Que ha perdido el culo sin pensárselo dos veces
Invitándote a una cerveza y poniéndote su hombro
Como mejor refugio
Para lágrimas de tinta y sangre.

Porque el tren de la vida es una línea circular, con diferentes caras y versiones
Como para quedarse a dar vueltas y recitar por los abrazos de alguien
Que valora más un peso
Que escribir versos a besos entre lunares.

Hay muy muy poquitas cosas de las que estoy seguro
Comencemos
Con que la vida es muy puta para llegar a viejos
Pero que muchas veces nos ofrece sus bragas
Para izar bandera de recuerdos y humedad
Y hemos de aprovecharlo y rellenar de poesía
El doble fondo de fango y mierda
Dado a que no todas las rubias sientan bien fresquitas y a morro.

Finalicemos, por principios básicos
No sé en qué creo y en que me declaro ateo
No sé si es el destino
Casualidad
Karma
O reciprocidad vital
Creo en sonrisas pasajeras
Y afirmo
Que hay cosas que es mejor no desenterrar nunca
Pero siempre son las mismas

Las que nunca se pueden guardar bajo tierra.

viernes, 2 de mayo de 2014

Miedo

Prender la punta de un cigarro observando la llama y pensar, ¿Quién no teme consumirse? bueno, mejor dicho

¿Quién no teme?

Ahora bien, ¿qué es el miedo? ¿Cuál es su color? ¿Su forma? ¿Su olor?

¿Qué temes?

¿Tienes fobia a las arañas? ¿A los arañazos? ¿A los perros? ¿A los gatos? ¿A la oscuridad, silencio, cáncer, perdida de queridos?

Es increíble pero el miedo es de las pocas cosas, que nos acompañan siempre en cada una de las etapas de nuestra vida, de canijos tememos a la oscuridad, en primaria tememos entregarle los suspensos a nuestros padres, tememos que los reyes nos traigan carbón, de adolescentes tememos lanzarnos a robar un primer beso y en vez de eso, cogemos cogorzas del quince y abrazamos el váter más de las veces necesarias, pero poco a poco vamos creciendo y, superada la barrera del primer beso, nos acojona perder la persona de la primera vez, esa sí que da miedo y, por desgracia, siempre acaba desapareciendo, pero aparece quien te quita el miedo a golpe de sonrisa, lo que no sabemos es que no desaparece

Solo esta hibernando

Debajo del vuelo de la nueva falda

Seguimos creciendo, maduramos a hostias, empezamos a perder seres queridos y joder… ¿Dónde quedo esa falda que nos quitó el miedo? Lo superamos, nos hacemos expertos en tropezar con la misma piedra aunque se disfrace de diferentes piernas, quizás un día encontremos la adecuada, tengamos una familia y la pregunta es, ¿Cuál será nuestro miedo entonces?  Seguramente nos parecerán insignificantes las cosas que antes se disfrazaron de miedo, cuando estemos jodidos por culpa del poderoso caballero, ante la idea de no poder alimentar unos hijos, pagar una hipoteca, luz, agua, gas, regalos, cenas, comidas y acabemos, planteando poner el culo de forma metafórica, o no tan metafórica..

De repente, intentando hacer de Maradona y regatear el miedo, nos encontramos canosos y con nietos, aportando ese granito de sabiduría que da la experiencia y por supuesto acojonadísimos, esperando a que nos llame la tierra.

Y sin darnos cuenta el miedo, nos ha hecho perder demasiadas oportunidades de sonreír de nuevo, de disfrutar, nos ha impedido ganar, nos ha vencido

Miento

Nos hemos rendido ante el.

A mí, me da miedo el acecho de fantasmas pasados lamiendo heridas que creí cerradas, pese a que todas las cicatrices pican con el cambio de clima, yo y mi puta inseguridad, hace que me de miedo el verde esperanza, influido por mi suerte, siempre acaba convirtiéndose en negro y tuve que dormir con una lucecita encendida hasta una edad bastante avanzada, con mi osito de peluche protegiéndome de las pesadillas.

Me da miedo perder cosas, que por irreal que suene, ni son mías.

Me da pánico hacer llorar a mi madre y mis hermanos.

Me da pánico hacerme ilusiones sobre cimientos de fango.

Me acojona pensar, que puedes darte cuenta de que soy uno más de entre tantos “pseudopoetas” del montón, que pongas tierra de por medio y te quedes, con quien en verdad te tiene, aunque ambos sabemos que no te apasiona ni te ilusiona como posiblemente, lo hago yo, y que sigas abrazándole, aunque pienses en mí y siga dentro de tu cabecita mirando el atardecer sentado en un banco, contigo, mientras te mimo, me acaricias y te abrazo, porque sabemos que ya tendremos tiempo para fuegos artificiales, cuando se ponga la luna.

Me da miedo perder a mis abuelos, a mis amigos, a mi piedra.

 Reconozco que de vez en cuando vuelvo a abrazar a mi osito, no por ahuyentar pesadillas (cosa que veo muy, muy complicado) si no por que echo de menos eso, un abrazo de vez en cuando para dormir a gustito.

Hoy, mi miedo se viste de verde esperanza, ayer desprendía un rico aroma a vainilla, mañana, no lo sé.

“Nada me da más miedo que una pantalla en blanco con su respectiva barrita gris parpadeante” una vez leí esto, ahora soy consciente de la realidad de estas palabras, da miedo intentar escribir y no saber cómo desvirgar un tema, del que sabes, que una vez comiences será muy jodido concluir y que posiblemente, terminaras tan empapado de mierda, o de miedo, que acabaras perdido entre tus propios versos y rodeado de fantasmas, no intentéis entenderlo, a veces ni yo me encuentro.


Miedo: ESE HIJO DE LA GRAN PUTA.